Glefaran quema enormes cantidades de madera, aproximadamente unas 300 toneladas al día (piensa en doce tráilers de 25 toneladas, cuánta madera significa), para generar pequeñas cantidades de electricidad. Esta cantidad de madera quemada genera una ingente cantidad de humo de madera que expulsa por la chimenea.
A la mayoría de la gente nos cuesta reconocer los peligros que tiene el humo de la madera. Desde los comienzos de la humanidad, el ser humano ha asociado una hoguera de leña al bienestar, al calor y a la protección. Hasta tiene un olor agradable; huele “a pueblo”, solemos decir. Sin embargo hoy la ciencia sabe que el humo que desprende la madera al arder tiene muchas sustancias muy dañinas para nuestra salud.
¿De qué está compuesto el humo de la madera? Está compuesto de GASES y PARTÍCULAS.
GASES
En la combustión de madera se emiten muchas sustancias en estado gaseoso como: benceno, tolueno, naftaleno, fenol, cresol, guaiacol, formol, acetaldehídos, glioxal, etc.
PARTÍCULAS
En la combustión de madera también se emiten otros compuestos en forma de pequeñas partículas como: Fluoranteno, Pireno, Benzo(a)antraceno, Criseno/Trifenileno, Benzo(b)fluoranteno, Benzo(a)pireno, Bencenodiol, Vanillina, Coniferaldehído, Ácido abiético, etc…
La mayoría de éstas sustancias que componen el humo de la madera son:
CANCERÍGENAS, MUTAGÉNICAS, GENOTÓXICAS Y ECOTÓXICAS
Está demostrado científicamente. El lector puede obtener información en el informe que los científicos han hecho para nuestra plataforma o buscar información objetiva en internet, por ejemplo en Wikipedia.
La lista de enfermedades producidas o agravadas por dichas sustancias presentes en el humo de la madera es muy larga:
ENFERMEDADES PULMONARES (EPOC), ASMA, ALERGIA, ICTUS, INFARTOS, CANCER…
Tamaños de las partículas
Los compuestos químicos anteriormente citados que se presentan en forma de partículas tienen diferentes tamaños:
Nombre | Tipo de Partículas | Tamaño |
PM 10 | Partículas gruesas | ≤ 10 μm (micras) |
PM 2,5 | Partículas finas | ≤ 2,5 μm (micras) |
PM 1 | Partículas muy finas | ≤ 1 μm (micras) |
PM 0,1 | Partículas ultrafinas (UFP) | ≤ 0,1 μm (micras) |
La denominación es PM (del inglés Particulate Matter) y a continuación su tamaño en micras. Una micra (1μm) es una milésima de milímetro, un milímetro dividido en mil partes.
En el gráfico siguiente se muestra el tamaño de dichas partículas contaminantes a escala comparándolas con el grosor de un cabello, de un glóbulo rojo o de un virus como el coronavirus.
La emisión de partículas gruesas (PM10) puede ser reducida con filtros en la fuente de emisión y además son las menos dañinas porque son atrapadas en las primeras defensas del cuerpo humano.
Sin embargo, las partículas finas y ultrafinas son prácticamente imposibles de retener en el foco de emisión con la tecnología actual, y son las partículas más abundantes y perjudiciales para nuestra salud porque debido a su pequeño tamaño penetran profundamente en el cuerpo humano.
Las PM 0,1 las respiramos con el aire y se depositan en los pulmones y debido a su pequeño tamaño pasan por los alvéolos al torrente circulatorio y a continuación se distribuyen por las arterias llegando al corazón, hígado, riñones, cerebro, etc…, causando y también agravando las enfermedades antes citadas: Alergias, Asma, EPOC, Ictus, Accidentes cerebro vasculares (ACVs), Infartos, 33 tipos de Cáncer (siendo los de pulmón y mama, los más comunes), Arritmias, Coágulos, Problemas tiroideos y un largo etcétera entre otros.
Gráfico de Wikipedia
Medir la emisión de estas partículas en la chimenea del foco de emisión es técnicamente difícil con la tecnología actual. Con un opacímetro se mide toscamente “lo opaco” que es el humo de la madera y se estima la cantidad de materia particulada que está saliendo en ese momento. Se mide en mg/Nm3 (miligramos por metro cúbico en condiciones normales). A día de hoy, con un opacímetro es imposible saber si esa cantidad de materia particulada que sale por la chimenea de Glefaran está compuesta de muchas partículas PM10 (poco peligrosas) o de millones y millones de partículas PM0,1 (muy peligrosas).
Como el volumen de una esfera es proporcional al cubo del radio, tenemos que el volumen -y la masa- de una partícula PM10 es mil veces superior a una PM1 y un millón de veces superior al de una PM0,1. Por tanto los miligramos por metro cúbico que se miden con el opacímetro en la chimenea daría el mismo resultado con una partícula PM10 o un millón de partículas PM0,1. Nadie sabe exactamente lo que sale por la chimenea de Glefaran. Pero sí sabemos que aproximadamente el 80% se compone de partículas finas y ultrafinas, es decir, de las partículas más dañinas.
Vemos en el gráfico comparativo de las partículas que el volumen de las PM0,1 es casi un millón de veces mas pequeño que una célula humana como un glóbulo rojo. Es fácil entender así la facilidad que tienen éstas partículas para depositarse profundamente en cada rincón del organismo humano e ir dañando poco a poco todos los órganos de nuestro cuerpo.
Además, éstas partículas no sólo se respiran, sino que atraviesan con facilidad los poros de la piel, que son agujeros mucho mayores que dichas partículas.
Además, no solo las respiramos o atraviesan nuestros poros, sino que esas partículas acaban depositándose en el suelo, en las plantas y en los alimentos que luego comemos nosotros directamente o que comen los animales que luego comemos nosotros, contaminando así toda la cadena trófica.
¿Confiamos en los científicos o en los gobernantes?
Los científicos nos dicen que la única garantía de que estas emisiones no afecten dramáticamente a la salud de las personas es alejar el foco de emisión de los núcleos de población. Algunos científicos hablan de 5 km y otros de 10 km. Todos sabemos que Glefaran está situada a pocos cientos de metros de viviendas, guarderías, escuelas, parques infantiles, a 1 km del centro de Gueñes y a 2 km del centro de Zalla.
También hay que saber que el Gobierno Vasco, Ayuntamientos y sus normativas NO PROTEGEN LA SALUD DE LAS PERSONAS. La normativa actual dice que se puede emitir 75 mg de partículas por metro cúbico, pero no limita el número de metros cúbicos de emisión, lo que es igual que no limitar nada. Una barbacoa en un txoko podría incumplir la normativa y una caldera gigante como Glefaran podría estar dentro de normativa. Es una normativa absurda que no tiene sentido porque no protege la salud de las personas.
De los lamentables alcaldes de Gueñes y Zalla hay poco que decir: el mayor problema que tienen sus pueblos es Glefaran porque afecta gravemente la salud de sus vecinos y ellos ni saben nada del tema -no quieren un debate público con nosotros porque dicen que no son técnicos-, ni quieren saber, lo cual es mucho peor. Cuando vinieron los científicos del CSIC por dos veces a explicarnos los riesgos que corremos, ni siquiera fueron a escucharlos. Los científicos se quedaron atónitos porque nunca habían visto semejante irresponsabilidad. Éstos alcaldes-títeres, en vez de defender a sus pueblos, se limitan a obedecer a sus amos de Sabin Etxea y a proteger los intereses privados de Jose Luis Orúe (si alguien tiene dudas, puede ver el pleno del ayuntamiento de Gueñes aquí). Da miedo saber cómo la salud de nuestras familias depende en gran parte de individuos de este nivel.
Existen multitud de ejemplos -tabaco, amianto, etc..- que demuestran que desde que los científicos alertan de un peligro hasta que los gobernantes (casi siempre coaccionados o sobornados por la industria contaminante de turno) promueven normas de protección, pueden pasar 20 ó 30 años. Los gobernantes siempre dicen lo mismo: “no está claro”, “hay que hacer más estudios”, y así pasan años y años mientras sus amigos de las empresas contaminantes ganan fortunas destrozando la salud de las personas. Una barbaridad como Glefaran estará terminantemente prohibida en el futuro, pero hasta que se prohíba hundirá el mapa de salud de Encartaciones.
La cantidad de partículas ultrafinas que emite cada día Glefaran es descomunal, y muchas de esas partículas que salen de la chimenea acaban depositándose en nuestro organismo, un día tras otro, con un efecto acumulativo en nuestra salud.
¿Y tú en quién confías?, ¿en los científicos que nos alertan del grave peligro al que nos somete Glefaran?…
…¿o en los gobernantes que nos dicen que no pasa nada, que todo está bien, que estemos tranquilos?, que van a hacer más estudios…
GUEÑES BIZIA
P.D.
● Si tienes alguna duda o si quieres unirte a esta causa, escríbenos a guenesbizia@hotmail.com y te contestaremos cuanto antes.
● Si quieres recibir nuestras notificaciones por Whatsapp, envía GB info al 688 817 532
Eskerrik asko!